Mousse de chocolate con frutos del bosque
Una mousse es un tipo de preparación culinaria a partir de clara de huevo montada a punto de nieve. Esta receta de origen francés se caracteriza por ser esponjosa y ligera. Y no solo hay mousse dulce, también se puede preparar salada
Pero en esta receta vamos a hacer algunos cambios y no vamos a utilizar ingredientes de origen animal.
Así que te animo a probar esta deliciosa y sencilla mousse que podrán disfrutar también tanto las personas que no puedan tomar huevo como las veganas.
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Mousse de chocolate con frutos del bosque
Ingredientes:
- 1 aguacate frío
- 1 plátano maduro congelado
- 100 gramos de frutos del bosque variados (arándanos, moras, frambuesas y también he incluido algunas fresas o frutillas)
- 3 cucharadas rasas de cacao en polvo
- 2 cucharadas de sirope de agave o de miel. Puedes usar azúcar si no tienes ninguno de los dos.
- 2 cucharadas de agua
- 2 cucharadas de chocolate rallado
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- 1/2 cucharadita de jugo de limón
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Elaboración:
- Pon todos los ingredientes (excepto los frutos del bosque y el chocolate rallado) en un procesador de alimentos o robot de cocina. Si no tienes, puedes usar una batidora de vaso o de mano igualmente.
- Procesa hasta que veas que queda una mezcla homogénea y suave.
- Prueba para ver si está a tu gusto o necesitas añadir un poco más de sirope.
- Guarda en la nevera o refrigerador hasta el momento en el que vayas a tomarla.
- Sirve en copas haciendo como una lasaña con la mousse y los frutos del bosque. Pon primero una capa generosa de mousse, luego añade frutas por encima, cubre con otra capa de mousse y por último algunas frutas más por encima y el chocolate rallado para decorar.
Nota: Congela el plátano la noche anterior. Solo tienes que pelarlo, cortarlo en 5 ó 6 trozos y listo. Si no puedes usar plátano congelado, puedes hacer el postre, pero sí que se nota que la mousse queda más suave todavía con el plátano congelado. Además, cuanto más fría esté, mejor. El aguacate con dejarlo en la nevera o refrigerador (entero, sin pelar) es suficiente.
Este postre queda espectacular, con una textura muy suave, ligera y rica. El contraste dulce con el ácido de las frutas del bosque nos encanta.
Y así, tal cual está deliciosa. Pero si quieres añadir toppings o extras, puedes pensar en frutos secos como pistachos, avellanas y almendras troceadas. También puedes usar otras frutas de temporada que tengas a mano en la zona en la que vives.
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