Té verde: fuente de antioxidantes que puede contribuir a cuidar tu salud

¿Para qué es bueno el té verde? El té verde es una excelente fuente de antioxidantes, puede ser beneficioso para reducir la inflamación en enfermedades inflamatorias como la artritis y se ha comprobado que la cafeína del té verde puede prolongar la activación de la termogénesis movilizando así nuestro metabolismo y la eliminación de grasa.

Junto con el agua y el café, el té es una de las bebidas más consumidas en todo el mundo, gracias a sus reconocidos beneficios se ha convertido en una hierba muy popular.

Para disfrutar de su sabor y de sus cualidades, elige siempre un té verde ecológico, libre de tóxicos y de mejor calidad.

Ahora bien, ¿te has preguntado por qué es tan famosa esta planta? Hoy te damos a conocer un poco más del  té verde, o como se llama científicamente Camellia sinensis.

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¿Qué es el té verde?

El té verde es una hierba milenaria proveniente de Asia, en particular de China y es una planta hoy en día ampliamente conocida por sus propiedades y beneficios para la salud.

El té verde se obtiene de las hojas frescas de la planta Camellia sinensis. Pasan por un tratamiento en que impide su fermentación, por eso su etiqueta de “verde”.  De esa forma, se evita que se pierdan sus valiosas bondades curativas y antioxidantes que son responsables de sus propiedades antienvejecimiento, anticancerígenas y refuerzan el sistema inmunológico.

Cabe destacar que mediante otros procesos, de esta misma hierba Camellia sinensis, se derivan otras variedades como el té negro, el té rojo y el blanco.

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Los principios activos del té verde

Son numerosos los componenetes del té verde que tienen un efecto protector beneficioso sobre la salud

Camellia sinensis está compuesto casi en un 40% por catequinas de diversas variedades que ayudan en la prevención de cáncer y del fotoenvejecimiento.

Los efectos beneficiosos de esta hierba se deben en gran medida a los polifenoles que contienen propiedades antioxidantes.

Según una leyenda china referente a este té, hace muchos años en el reinado de Shen nong, hubo una epidemia muy grande en donde enfermó y murió mucha gente. En medio de su desesperación este emperador salió a la búsqueda de un antídoto y dio con esta maravillosa planta.

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¿Para qué sirve el té verde?

Parkinson y Alzheimer

El té verde podría ayudar a protegernos contra enfermedades de tipo neurodegenerativo como por ejemplo Parkinson y Alzheimer. Los componentes de esta bebida ejercen acción protectora de las células de nuestro sistema nervioso central y contribuyen a prevenir daños. Aunque faltan muchos estudios en este campo, beber té verde puede ser beneficioso para contribuir a prevenir o retrasar la aparición de estas enfermedades degenerativas tan comunes hoy en día que han venido aumento en los últimos años.

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Protege la salud cardiovascular

El té verde es un aliado de nuestro corazón y de nuestra salud cardiovascular en general.

Las patologías cardiovasculares se encuentran entre las primeras causas de mortalidad en todo el mundo. El té verde tiene la cualidad de disminuir la absorción de triglicéridos y de colesterol, que además puede traducirse en una reducción en la ganancia de peso.

Además el té verde tiene un ligero efecto hipotensor y en estudios llevados a cabo durante 8 años se ha visto acción protectora ante ateriosclerosis aórtica y riesgo en enfermedad coronaria entre las personas que beben té. El té verde regula la función cardiovascular.

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Té verde y cáncer

Obviamente ninguna planta medicinal ni alimento va a prevenir enfermedades por sí solo. Es necesario llevar un estilo de vida saludable: una dieta adaptada a nuestras necesidades y evitar hábitos malsanos como fuma o el sedentarismo. Dentro de los hábitos beneficiosos que podemos incorporar para estar sanos y prevenir dolencias, el té es una herramienta que puede contribuir a una buena salud.

El potencial del té verde a la hora de ayudar a prevenir enfermedades se encuentra en la cantidad de antioxidantes que posee, los cuales combaten el daño producido por los radicales libres en nuestro cuerpo. Por eso se dice que este té tiene acción citoprotectora, es decir, que protege a nuestras células.

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Contra la artritis y enfermedades óseas

El té verde contiene fluoruro que ayuda a fortalecer y aumentar la densidad ósea ayudando así a mantener nuestros huesos sanos. Es beneficioso para la salud general de los huesos, ya que, el té verde protege el cartílago evitando el roce de los huesos y las malformaciones que derivan de esta enfermedad. Incluso se ha visto que puede ser de beneficio para proteger ante las fracturas de cadera.

En cuanto a la artritis, el consumo de esta bebida nos ayuda a reducir los riesgos de padecerla en su forma reumatoide.

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Obesidad y diabetes

En los últimos años el interés de los investigadores por el efecto del té verde en personas con obesidad o sobrepeso y en los casos de diabetes ha incrementado. De momento se sabe que el té verde, en particular las catequinas, tiene efecto positivo en casos de obesidad y diabetes.

En personas con obesidad el consumo de té verde ha mostrado ayudar a no ganar más peso.

El té verde posee componentes que, además de proteger a las células beta del páncreas, mejora el metabolismo de la glucosa y reduce los picos de glucosa, algo especialmente beneficioso para personas con diabetes.

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Té verde contra Candida albicans

Se ha estudiado la acción antifúngica que ejercen las catequinas. En particular, se ha estudiado cómo las catequinas del té verde, junto con tratamientos antimicóticos convencionales, pueden ayudar en tratamientos contra la candidiasis. Además el uso de té verde puede reducir los efectos secundarios de los antimicóticos.

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Acción hepatoprotectora y protectora de los riñones

El té verde contribuye a prevenir enfermedades crónicas del hígado y a retrasar su progresión y degeneración de las funciones de este órgano en caso de que éstas ya existan.

Además se ha podido estudiar su efecto protector sobre los riñones y cómo el té verde puede reducir el riesgo de que se formen piedras en el riñón.

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Mejora del sistema inmunológico

El contenido en antioxidantes hace que el té verde sea un remedio natural para fortalecer nuestras defensas, especialmente en épocas del año en las que somos propensos a sufrir resfriados y gripes.

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Contra el envejecimiento

Es debido a su acción antioxidante y citoprotectora que beber té verde ayuda a que las células que forman parte de los órganos y tejidos de nuestro organismo se regeneren y estén protegidas para poder realizar sus funciones, contrarestando los daños que puedan producir los radicales libres.

Esto es muy importante ya que, contribuye a prevenir enfermedades.

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¿Cómo se prepara el té verde y cómo se toma?

El té verde es una infusión y se toma caliente principalmente, pero también lo podemos beber frío (con hielo) como bebida refrescante, algo mucho más agradable durante los meses calurosos del verano.

Sigue estos pasos para saber cómo preparar una taza de té perfecta:

1. Coloca 2 gramos de té verde en la tetera
2. Añade 200 ml de agua que esté a 80 ºC (que esté caliente pero que no llegue a hervir)
3. Espera entre 2 y 3 minutos y echa el agua de la tetera a la taza

 

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Contradicciones del té verde

• Deben evitar el consumo de té verde las mujeres embarazadas. Durante la etapa de lactancia se debe tomar como máximo dos tazas al día.
• El té verde contiene cafeína. Evita tomarlo varias horas antes de acostarte por la noche para que no te altere el sueño.
• Si tomamos esta infusión en exceso podemos generar una serie de contradicciones como, por ejemplo: irritabilidad, dolor de cabeza, insomnio, mareo, náuseas y/o vómitos.
• Si tomas medicación o tienes alguna duda, consulta con tu médico antes de tomar té verde.

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Fuentes consultadas

https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC2855614/

Valenzuela, B. (2004). El consumo te y la salud: características y propiedades benéficas de esta bebida milenaria. Revista chilena de nutrición, 31(2), 72-82.

González de Mejía, E. (2003). El efecto quimioprotector del té y sus compuestos. Archivos latinoamericanos de nutricion, 53(2), 111-118.

Sevilla, C. P., & Mach, N. (2014). Efectos del té verde sobre el riesgo de cáncer de mama. Revista española de nutrición humana y dietética, 18(1), 25-34.

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