Remedios caseros para edema y retención de líquidos

 

El edema es la acumulación excesiva de líquido en los tejidos. Popularmente también se le llama retención de líquidos. Esta acumulación provoca cierto malestar y puede verse agravada en personas que sufren de hipertensión, enfermedades renales, que fumen, beban o que sean sedentarias.

 

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Síntomas del edema

• Inflamación
• Hinchazón (principalmente de tobillos, manos, piernas, pies)
• Extensión del abdomen
• Piel tirante y pálida

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Causas del edema

• Embarazo
• Traumatismo (esguince, torcedura, lesión)
• Mala circulación sanguínea
• Cirrosis
• Enfermedades renales y cardiovasculares
• Calor
• Anticonceptivos orales
• Sedentarismo
• Exceso de peso
• Menstruación
• Menopausia
• Malos hábitos alimentarios
• Ropa muy ajustada

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Remedios caseros para el edema o la retención de líquidos

Para combatir el edema o retención de líquidos es imprescindible ir a la raíz de la causa y tratarla.

El uso de diuréticos comerciales está desaconsejado porque pueden ser demasiado agresivos, pudiendo llegar a provocar la deshidratación del organismo, lo cual podría contribuir a la aparición de fatiga, hipertensión, problemas digestivos o aumento de peso en caso de que se mantuviera como un hábito.

Controla el consumo de sal. Ya no sólo la que echas en la elaboración de comidas sino la que viene escondida en productos elaborados y procesados. Sustituye la sal de mesa refinada por sal de mar. Utilizar hierbas aromáticas frescas cuando cocines y verás que no necesitas añadir tanta sal.

Varias veces al día, eleva las piernas durante 15 minutos. También puedes mantener las piernas ligeramente elevadas durante la noche. Esta sencilla acción favorece el drenaje del exceso de líquido.

Masajes aplicados en la zona local y que sean ascendentes ayudan a reducir los edemas. Se pueden hacer dos veces al día con un aceite base al que añadas unas gotitas de un aceite esencial indicado para estos casos (mira aquí).

Los cambios de temperatura también son beneficiosos para la retención de líquidos. Termina las duchas con agua fría y haz movimientos circulares ascendentes desde el pie hasta la cadera. También puedes poner agua con hielo en un container y meter los pies durante 15 minutos.

El cilantro es una planta que activa la función de los riñones y favorece la depuración del organismo. Utilízalo fresco en tus platos tanto como te sea posible, pero además puedes machacar sus semillas y hacer una infusión o bien molerlas y añadirlas a las ensaladas.

La infusión de diente de león es muy efectiva para los edemas, es muy depurativa, activa la circulación sanguínea y promueve la eliminación de líquidos de forma suave.

Las semillas de lino son excelentes para estos casos. Muélelas y añádelas a tus platos al final de la preparación.

El pepino es un alimento excelente para estos casos. Tómalo tanto como puedas. Lo puedes disfrutar en jugos verdes y todo tipo de recetas.

Otra forma casera de mejorar los edemas es aplicando friegas de vinagre de sidra de manzana. Esto ayuda mucho a reducir la hinchazón y drenar el exceso de líquido.

La infusión de Fumaria es beneficiosa para los casos de edema y retención de líquidos. Prepárala calentando agua y cuando esté a punto de hervir échala sobre una taza en la que habrás puesto una cucharadita rasa de esta planta. Tapa y deja reposar por 5 minutos. Después cuela y bebe cuando se va enfriando. Puedes endulzar con stevia líquida.

El jengibre ayuda a eliminar el exceso de líquidos de forma progresiva y suave. Tómalo en infusión o bien añadiéndolo a los jugos o rallado en tus ensaladas. También se puede usar jengibre de forma externa para reducir la inflamación.

Asegúrate de que comes frutas y verduras frescas que te aportarán agua, especialmente la piña, espárragos, sandía, cebolla, etc. También debes beber la suficiente agua en base a la que necesites. Si sudas mucho o haces mucho ejercicio debes aumentar la cantidad, pero en caso contrario no abuses del agua.

Empieza a realizar una rutina de ejercicios adecuada a tus condiciones físicas y posibilidades. En muchos casos, simplemente andar todos los días a buen ritmo durante 45 minutos puede ser la solución a la retención de líquidos.

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Estos son consejos generales. Para saber qué es mejor en tu caso particular acude a un profesional de la salud que pueda darte indicaciones para tus necesidades particulares.

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