Verónica, planta medicinal para dolencias pulmonares, afecciones reumáticas o trastornos digestivos

 

Alergia, insomnio, malas digestiones, dolores reumaticos, gastritis…. son algunas de las dolencias para las que la Verónica está recomendada debido a su acción medicinal.

Si deseas conocer los usos de esta plantas, cómo se toma y las contraindicaciones, te lo contamos todo en este artículo.

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¿Qué es la Verónica?

Veronica officinalis, comúnmente conocida como Verónica, es originaria de Europa y del este de los Estados Unidos, donde crece en campos abiertos y prados. Es una planta perenne bastante aromática. Tiene una larga historia de uso medicinal como agente diurético y diaforético. Se ha utilizado en el tratamiento de trastornos renales, hemorragias y enfermedades de la piel. Los herbolarios contemporáneos frecuentemente usan esta hierba para tratar la tos bronquial, la inflamación de las membranas mucosas y otras afecciones inflamatorias, incluido el reumatismo.

El género Veronica L. es el género más grande de la familia Plantaginaceae, con cerca de 500 especies diseminadas en la mayor parte del hemisferio norte y en muchas partes del hemisferio sur; presenta una gran diversidad ecológica, con especies que crecen en hábitats de estepa, acuáticos a secos, desde el nivel del mar hasta las regiones alpinas altas. Crece silvestre en prados secos, bosques, pastos y brezales. Prefiere en general los lugares húmedos y cálidos. Esta diversidad y el hecho de que muchas especies tengan hermosas flores azules, puede explicar el interés que la planta Verónica ha suscitado durante mucho tiempo.

La Veronica officinalis L. es una planta medicinal popular en varios países europeos, especialmente en Europa central y oriental y los Balcanes, tiene una larga historia de uso en la medicina tradicional. Se cultiva también en algunas regiones tanto del norte de América, como al sur de América Latina.

Algunos de los nombres comunes por los que es conocida esta planta son:

Verónica, verónica común, verónica macho, verónica oficinal, vinagra, hierba/planta de la triaca, triaca/tríaca, hierba morga, malarranca, paulina, té de España, té de Europa, té de ribera, becabunga, bérula o Hierba de los Leprosos (esta última denominación la habría obtenido por haber curado de lepra a un rey de Francia).

Es una planta perenne de tallo rastrero y ramificado. Las hojas son opuestas, ovales y dentadas, con pecíolo corto y color verde. De sus axilas brotan espigas o racimos erguidos formados por flores blancas,  azuladas o violáceas con un aroma muy suave y un sabor amargo; además, da unos pequeños frutos repletos de semillas. Florece entre mayo y agosto, dependiendo de la altitud del terreno en que crece. Toda la planta está recubierta de un fino vello.

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Principios activos y acción terapéutica

Las especies del género Veronica son ricas en glucósidos iridoides, principalmente aucubina, catalpol y ésteres de ácido benzoico y cinámico de catalpol, todos  compuestos que han sido investigados por sus bio-actividades. El análisis fitoquímico identificó verprosida y verminosida como los glucósidos iridoides más abundantes.

Su contenido de taninos y aucubósidos le aportan su sabor amargo y propiedades astringentes, aperitivas y digestivas. También contiene saponinas que le confieren propiedades balsámicas. Sus atributos como antinflamatorio y antialérgico son proporcionados por los heterósidos.

Otros principios activos de la Verónica son la acetofenona, flavonoides como la apigenina, escutelarina y lutelonia, ácidos orgánicos, vitamina C, aceite esencial, sales minerales, manitol, pungenina e isopungenina.

Estudios recientes detectaron otros compuestos en el género Veronica como son: ácido p-cumárico, ácido ferúlico, hispidulina, β-sitosterol, eupatorina y eupatilina, los cuales probablemente juegan un papel en su actividad terapéutica.

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Acción medicinal y propiedades de la Verónica

La planta Verónica se considera como diurética, expectorante, cicatrizante, aperitiva, digestiva, antiinflamatoria, antialergénica, hipocolesterolemiante, sedante y depurativa.

Se utiliza popularmente como tónico estimulante del apetito y medicina estomacal en trastornos digestivos tales como: dispepsias, gastritis, úlceras gastroduodenales y flatulencias.

En caso de afecciones reumáticas, incluyendo la gota, se aplica como cataplasmas calientes o baños para disminuir los dolores reumáticos.

Asimismo, contiene saponinas, de acción balsámica para los bronquios y presenta propiedades expectorantes, por lo que se la emplea en el tratamiento de la tos, el asma, la bronquitis y el enfisema pulmonar.

Antiguamente, tenía gran popularidad como infusión en Inglaterra a modo de té relajante.

Su contenido de taninos favorece la curación de heridas, llagas y úlceras, y puede ser utilizada mediante su decocción para lavar la piel. Aplicado en heridas y aftas bucales, ayuda a la cicatrización y se suele utilizar como gargarismo para aliviar el dolor de garganta. También se emplea para calmar la picazón y suavizar la piel reseca.

La Veronica officinalis L. tienen una larga historia de uso medicinal como agente diurético y diaforético.

Se estudió el contenido fenólico y esterólico, y las actividades antioxidantes y antimicrobianas de tres especies de Verónica (Plantaginaceae), V. officinalis L., V. teucrium L. y V. orchidea Crantz. Con respecto a la actividad antimicrobiana de las especies investigadas, Staphylococcus aureus, Listeria monocytogenes y Listeria ivanovii fueron las cepas más sensibles. Los resultados obtenidos por este estudio pueden servir para promover un mejor uso de representantes del género Veronica como agentes antioxidantes y antimicrobianos.

En 2013 investigaciones demostraron por primera vez la actividad antiinflamatoria in vitro de los extractos preparados a partir de V. officinalis.

Recientemente, algunos estudios confirman que ciertas especies de Verónica exhiben una bioactividad notable antibacteriana, antioxidante, antiinflamatoria y citotóxica.

Se investigaron las especies V. officinalis, V. teucrium y V. orchidea de la flora espontánea rumana en relación con su contenido en ácidos cafeicos y clorogénicos, actividad antioxidante y antimicrobiana contra cepas bacterianas anaerobias. Los resultados de este estudio aportan nuevas perspectivas para un mayor desarrollo farmacéutico y nutracéutico de las especies del género Veronica como fuentes naturales de compuestos bioactivos con potencial antioxidante y antimicrobiano.

Otros estudios comprobaron los efectos antiinflamatorios observados del extracto de Veronica offcinalis a nivel molecular que explicarían su uso para el tratamiento de enfermedades pulmonares.

En cuanto al uso tradicional de la Veronica officinalis como hipocolesterolemiante, se condujo un estudio experimental donde se  demostró que no ejercía un efecto significativo sobre los niveles de colesterol y triglicéridos en el suero de los animales de dieta libre de colesterol. Por el contrario, la Veronica officinalis si tuvo un efecto reductor sobre los triglicéridos y el nivel de colesterol en el suero de animales con dieta alta en colesterol, demostrándose su efecto hipocolesterolémico.

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Recomendaciones para su uso

Para los preparados medicinales de la Verónica se utiliza toda la planta y generalmente, empleando la infusión para su uso interno, o la decocción para el uso externo.

Uso interno

Infusión:

• Añadir a una taza de agua hirviendo una cucharadita de planta seca y desmenuzada. Dejar reposar 5 minutos. Filtrar y tomar unas 3 tazas al día.
• 20 g de Verónica por litro de agua: colocar la hierba en una jarra, verter el agua hirviendo, tapar y dejar reposar durante 5 minutos, luego colar y beber. Se toman 3 o 4 tazas por día.

Como alternativa a la infusión, el Dr. Burgstaller Chiriani usa una tintura con 20 g de Verónica y 100 cc de alcohol de 60°. Dejar macerar 15 días, agitando el preparado diariamente, colar y guardar en un frasco de vidrio oscuro con tapa. Se toma 1 cucharadita (15 gotas) diluida en 1 copita de agua, 3 o 4 veces por día.

Uso externo

Decocción:

Añadir 40  a 50 g. de la planta entera, desecada, a un litro de agua,  hervir  durante 10 minutos. Aplicar en forma de lavados o compresas.

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Precauciones y contraindicaciones

Hasta la fecha, la Veronica officinalis no tiene contraindicaciones. Lo más probable es que la planta no haya sido suficientemente estudiada por la medicina oficial. Lo único que no se recomienda es administrarlo a niños menores de tres años, mujeres embarazadas y que estén lactando, personas que sufren de hipotensión, enfermedad cardíaca severa, con una acidez incrementada del estómago y en personas con intolerancia individual.

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Bibliografía consultada

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