Cómo eliminar las plantas espontáneas o las llamadas malas hierbas

Malas hierbas (llamadas así antiguamente), las plantas espontáneas o adventicias pueden aparecer en nuestro huerto ecológico con mayor o menor frecuencia dependiendo de muchos factores. Las plantas espontáneas nos pueden ayudar a conocer más sobre el tipo de suelo en el que cultivamos, evitan la erosión de los suelos, favorecen la aireación del suelo profundo, aumentan la fertilidad de la tierra, son capaces de absorber a través de las raíces los metales pesados, lo cual es muy útil para recuperar terrenos para el cultivo, las podemos añadir a la pila del compost, etc.

No obstante, si quieres eliminar las plantas adventicias de tu huerta sin necesidad de usar químicos perjudiciales que matan microorganismos beneficiosos y perjudican a la tierra, debes saber que hay formas de evitar su crecimiento y de eliminarlas que son ecológicas y sostenibles.

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Cómo eliminar malas hierbas, plantas espontáneas o adventicias

Observa

La observación en el huerto es imprescindible para sacarlo adelante de forma óptima, y en cuestión de plantas espontáneas no es menos. Si vamos observando regularmente el huerto podremos identificar a las plantas adventicias en sus primeras fases de crecimiento y podremos eliminarlas antes de que éstas lleguen a desarrollarse totalmente. Así evitamos que produzcan semillas y éstas se esparzan por el huerto, dando como resultado más plantas no deseadas. Además, hay plantas como la Angélica menor que crecen muy rápido, por lo que debemos estar atentos, especialmente durante la primavera y el verano. Controlar y evitar el exceso de abono y de agua también será importante para que no proliferen plantas espontáneas.

Mulch o acolchado

Uno de los muchos beneficios que conlleva esta práctica es que evita la aparición y desarrollo de las plantas no deseadas. El acolchado es una capa de pinaza, serrín, cortezas, gravilla, etc. que colocamos alrededor de las plantas cultivadas que va a impedir que crezcan plantas espontáneas. Además esta práctica nos hará ahorrar agua, evita daños en las raíces por temperaturas demasiado altas o bajas, entre otros beneficios. Se debe preparar el mulch cuando trasplantamos o cuando la plántula ha alcanzado unos 20 cm, dejando suficiente espacio para no cubrir el tallo.

Abonos verdes

Si tenemos el suelo «ocupado» con otras plantas cultivadas será más difícil que proliferen las plantas espontáneas. Los abonos verdes tienen pocos requerimientos y protegerán ante plantas no deseadas además de ofrecer muchos otros beneficios al conjunto de nuestra huerta.

Excavar el terreno

Quizá sea la opción más laboriosa de todas, pero también resulta una forma efectiva de eliminar plantas espontáneas, y es excavando bien todo el terreno en el que vamos a cultivar, a una profundidad no superior a 50 cm. Debemos asegurarnos de que eliminamos completamente todas las plantas, porque podrían volver a crecer si dejamos las raíces..

Extraerlas de forma manual

Otra práctica para realizar el desherbado es hacerlo directamente con la mano. Cuando identificamos una planta no deseada la podemos eliminar de forma manual, eso sí, prestando atención a eliminar totalmente las raíces, porque podría reproducirse de nuevo si quedara alguna porción en la tierra.

 

Puedes ampliar y ver mucha más información detallada sobre la eliminación de plantas espontáneas en este manual

Hay cientos de plantas que están catalogadas como «malas hierbas», algunas de ellas son la Ortiga, el diente de león, la Acedera o lengua de vaca, las cuales nos sirven para elaborar preparados naturales para mejorar la fertilidad de la tierra, eliminar plagas, etc. al igual que han formado parte de la medicinal popular durante muchas generaciones. Si crecen en tu huerto de forma espontánea aprovecha sus propiedades medicinales y utilízalas para elaborar remedios caseros.

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