El cultivo de las Coles de Bruselas

Las Coles de Bruselas son una deliciosa verdura variedad de la col silvestreBrassica oleracea, llamada gemmifera porque produce una serie de pequeñas yemas que se asemejan a coles en miniatura, y que son la parte de la planta que se consume.

Sus posibilidades de producción desde finales del verano hasta finales del invierno, dependiendo de la región y clima reinante, proporcionan a esta hortaliza un valor añadido y el derecho a un rincón en nuestra huerta.

.

Reproducción y cultivo

Las coles de Bruselas se reproducen por semillas, desde marzo hasta junio siempre en semillero y habitualmente desprotegido, salvo que el clima de la región no lo permita. El suelo donde se realizará la plantación definitiva debe ser neutro, por lo que deberá ser corregido con cal si es ácido; le conviene aquellos suelos más bien duros y apelmazados. El trasplante se realiza cuando las plantitas alcancen entre 10 y 13 cm., en eras y dejando entre las plantas una distancia de unos 80 cm., pues manifiestan un gran desarrollo lateral. A lo largo de todo el crecimiento es fundamental aporcar el tallo (cubrirlo un poco con tierra).

.

Brotes de Brassica oleracea (gemmifera)

El riego debe ser frecuente en la época cálida. Durante todo el periodo de cultivo hay que escardar las malas hierbas, eliminando las hojas que se vayan tornando amarillas. Si el lugar está expuesto a vientos fuertes es conveniente poner unos tutores a las plantas, pues alcanzan alturas de hasta 80 cm.

.

Recolección

Se comienzan a recolectar desde el mes de septiembre, y dependiendo del clima del lugar y la época de siembra puede mantenerse la producción incluso hasta enero. Se van recogiendo en primer lugar las cabecitas que nacen en la parte inferior del tallo, progresando hasta la parte superior conforme se vayan consumiendo.

.

Plagas y enfermedades

Las coles de Bruselas son atacadas habitualmente por variados insectos masticadores, como las orugas de la mariposa de la col, los cuales habrá que tratar con los productos específicos si no hay más remedio, pues lo más adecuado es prevenir. El método más simple de prevención es rodear los cuellos de las plantas con cenizas.

natureduca
.

.