Bosques de alimentos: aumentan la fertilidad y productividad y reducen plagas y enfermedades

Un bosque de alimentos no sólo nos provee de frutas y hortalizas sino que además regenera el suelo impulsando la aparición de microorganismos beneficiosos que promueven la fertilidad de la tierra y ésta a su vez favorece el desarrollo de las plantas y crea un ecosistema muy rico en biodiversidad.

El bosque comestible es una de las mejores formas de obtener nuestros alimentos, pero ¿cómo conseguirlo?. Empezando desde la base: la tierra. Por que para cultivar plantas antes debemos «cultivar» la tierra

Lo primero es hacer un análisis del suelo. Te recomiendo que el análisis sea lo más completo posible (textura del suelo, pH, materia orgánica, plantas adventicias, saturación, contaminación, capacidad de intercambio catónico, biodiversidad presente…. etc.). Lo más seguro es que tengas que recurrir a alguna empresa que haga análisis del suelo dentro del campo de la agroecología y pueda hacer este análisis por ti, y bien que merece la pena.

Una vez que tienes los resultados y sabes qué carencias y necesidades tiene el suelo, con la laya o la horca de doble mango trabájalo moviéndolo y aireándolo hasta 50 cm y añade una mezcla con los minerales que necesita el suelo, incorpora compost y por último el mulch o acolchado.

Sembramos o trasplantamos las variedades que hayamos elegido (son especialmente interesantes las plantas perennes, así no tendremos que labrar y trabajar la tierra de nuevo). La tierra se verá enormemente mejorada si incorporamos la mayor diversidad posible de plantas, ya que aumentará la aparición de microorganismos beneficiosos que mejorarán el desarrollo de las raíces y la biodisponibilidad de nutrientes.

Si haces otro análisis del suelo a partir del año de haber comenzado el bosque de alimentos verás que éste ha cambiado totalmente. De hecho, de unos 2 a 5 años la tierra habrá alcanzado un nivel más que excelente en cuanto a fertilidad y riqueza en nutrientes, se estará generando humus, pues las lombrices proliferan, la tierra habrá alcanzado un buen nivel de retención de agua, se multiplican las micorrizas que mejoran la actividad beneficiosa en la tierra, etc.

Con este sistema verás que las enfermedades y las plagas se minimizan, y esto significa que tú no tienes que emplear tiempo en recoger plantas medicinales, realizar preparados con ellas, aplicarlos y hacer seguimiento de los resultados.

Además aumentará considerablemente la productividad y obtendrás abundantes cosechas de alimentos saludables.

Los bosques son sinónimo de abundancia, biodiversidad y fetilidad, donde se crean relaciones sinérgicas que fomenta la multiplicación y proliferación dentro de un sistema autoregulado. ¿Por qué no imitar a la sabia naturaleza y crear bosques comestibles? Además éstos se se pueden establecer en cualquier clima y aprovechar así sus peculiaridades tan beneficiosas.

En lugar de deforestar bosques para hacer campos de cultivo ¿porqué no producimos alimentos naturalmente creando bosques?

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